Babysitter Wanted

Su título parece de película pornográfica (“Se Solicita Niñera”), pero me atrevo a decir que Babysitter Wanted pertenece al pequeño nicho de películas de horror cristianas... e incluso al más pequeño nicho de películas de horror cristianas que son realmente buenas. Ignoro si esa fue la intención de sus directores, pero el aspecto religioso es innegable, y está expresado de manera honesta y creíble, sin ironía, irreverencia, o traviesos guiños que nos hagan cómplices del chiste. Quizás las muy sangrientas escenas que llegan al final de la película confundan su intención pero, después de todo, The Passion of the Christ también mostró abundante sangre... y nadie duda su propósito.

El comienzo de Babysitter Wanted no es muy auspicioso: una joven mujer está atada a una mesa de madera, y su aterrorizada mirada sigue la mano del anónimo villano, listo para golpearla con un martillo en la frente. Muy bien. Todo parece indicar que estamos en presencia de otra tardía obra de "porno-tortura". Pero conforme avanza la trama y empiezan a incorporarse nuevos clichés del horror fílmico queda claro que los cineastas tuvieron una idea diferente... no muy original, pero al menos interesante. Y cuando eventualmente llegamos a la vieja fórmula de "joven niñera acechada en una solitaria casa", ya no queda tan claro hacia dónde se dirige la historia.

La joven en cuestión es Angie (Sarah Thompson), cristiana devota que por primera vez se aleja de casa para ir a la universidad, donde encuentra un ambiente de drogas y sexo muy distinto al que está acostumbrada. Para empeorar la situación hay un asesino suelto, a quien se le imputa el secuestro y desaparición de varias mujeres en los alrededores del colegio. Entonces, en parte para alejarse de su dormitorio y en parte para ganar un poco de dinero, Angie acepta cuidar al hijo de una afable pareja de campesinos en las afueras de la ciudad. Pero la primera noche que Angie cuida al pequeño y tímido Sam (Kai Caster), una amenazadora figura se acerca a la casona y trata de entrar por la fuerza. Angie habla a la policía, quien le aconseja calma... pero será difícil mantenerla cuando el deforme individuo finalmente logra entrar con un enorme cuchillo en su mano...

El libreto de Babysitter Wanted da muchas vueltas y ciertamente logró confundir mis expectativas, pero a fin de cuentas reconocí que su truco consistió en combinar fórmulas, en vez de crear algo en verdad innovador. Como sea, la estrategia funciona, y dio como resultado una experiencia bastante entretenida que supera en casi todos los aspectos a la gran mayoría de cintas de horror independiente con poca ambición y menos creatividad que he visto en meses recientes. No obstante, sospecho que los directores Jonas Barnes y Michael Manasseri no tienen interés real en el cine de terror, y aspiran a proyectos futuros más ambiciosos y “legítimos”. Pero hicieron su tarea, estudiaron a la competencia y decidieron que un debut en este género requiere pocos recursos económicos, tiene un público casi garantizado, y al mismo tiempo ofrece amplio potencial para lucir su genuino talento. Quizás un plan frío y calculador, pero el resultado habla por sí mismo.

Dejando a un lado la mencionada falta de originalidad, hay mucho que aplaudirle a esta eficiente película. Para empezar, la selección de actores es perfecta; los personajes son clásicos estereotipos que hemos visto en cientos de películas similares, pero eso no opaca el considerable logro de encontrar al actor exacto para darles vida propia... si bien no pretenden ganar Óscares. También tenemos como atributo la sólida dirección, exenta de floritura digital, aunque abusa un poco de los consabidos acentos musicales para generar sobresaltos. No obstante, genera buena tensión, y en algunos momentos nos hace dudar sobre el destino de la protagonista. Finalmente la cinematografía (sí, filmada en cine y no en video de alta definición) viste cada escena con el tono correcto, desde las soleadas y frívolas escenas en la universidad, hasta la amenazadora secuencia final, suficientemente oscura para causar angustia, pero con la adecuada iluminación para evitar desconcierto.

Quizás estoy elogiando demasiado esta sencilla película. No representa la salvación del horror independiente ni quedará mucho tiempo en la memoria, pero Babysitter Wanted realiza muy bien sus dos labores principales: hacernos pasar un rato de emocionante acción (con abundante sangre); y marcar la llegada de dos cineastas muy interesantes, que saben lo que hacen y muestran desde su primera película suficiente madurez para enfrentar retos más sustanciosos. ¿Quién sabe? Incluso podrían hacer algo realmente original, en éste u otro género. Estaré atento.
Calificación: 8