jueves, 30 de abril de 2009

Caprica

Para justificar su inclusión en este blog podríamos llamarle una película directa a DVD, pero en verdad Caprica es simplemente el programa piloto de una nueva serie de televisión que funcionará como precuela de Battlestar Galactica, mostrando los eventos (cincuenta años en el pasado) previos a la invasión de cylons sobre las 12 Colonias que causó la diáspora de la humanidad, obligada a vagar por el universo en busca de un nuevo planeta para colonizar. Quienes hayan sido fieles seguidores de esa serie (como yo), conocerán por anticipado el eventual destino de esos sobrevivientes, y pensé que ese hecho disminuiría el impacto emocional o el suspenso en esta precuela; pero el excelente guión de Ronald D. Moore nos sumerge de inmediato en un fascinante mundo suficientemente parecido a la Tierra contemporánea para hacerlo de inmediato accesible, pero con marcadas diferencias para capturar la imaginación del espectador y al mismo tiempo especular sobre el futuro de la tecnología y su impacto sobre la humanidad.

Un breve marco histórico para quien no entendió nada del párrafo anterior: La venerable serie Battlestar Galactica debutó en el año 1978 como una hueca e inocente fantasía espacial inspirada por el éxito de Star Wars, cuya premisa (tenuemente basada en las teorías "exo-arqueológicas" de Erich Von Daniken) comenzó con una invasión de "cylons" (robots extraterrestres) sobre los doce planetas habitados por seres humanos. El ataque resultó en la casi total extinción de la humanidad, y los pocos sobrevivientes se vieron obligados a abandonar sus respectivos planetas a bordo de una improvisada flotilla de naves espaciales. Entonces, bajo la protección de Battlestar Galactica (la única nave militar que escapó la destrucción), los últimos fragmentos de la raza humana vagan por el universo en busca de la legendaria decimotercera colonia, también conocida como... la Tierra.

La serie tuvo moderado éxito, pero fue cancelada después de veinticuatro episodios (me abstendré de mencionar la abominación de Galactica 1980). Veinticinco años después, el productor Ronald D. Moore (veterano de Star Trek: The Next Generation y Star Trek: Deep Space Nine, dos de mis programas favoritos) propuso al canal Sci Fi una "re-invención" de Battlestar Galactica. En su momento la idea me pareció absolutamente ridícula (opinión compartida por mucha gente), pero cuando finalmente debutó en el 2003, sorprendió a todos con su intenso drama, fascinantes personajes y creativa mitología. En pocos meses la serie fue aclamada como uno de los mejores dramas televisivos, y su reciente conclusión cerró con broche de oro (en mi humilde opinión) cuatro temporadas de excepcional televisión.

Meses antes de tal conclusión se empezó a rumorar la creación de la serie Caprica, más eficiente en costos de producción por estar ubicada en un planeta similar a la Tierra (traducción: filmada en Canadá), pero conducida por el mismo equipo de sobresalientes productores y escritores. Y ahora, probando la viabilidad comercial del proyecto y buscando generar expectativa entre los fans, NBC Universal (dueña del Sci Fi Channel) lanzó el primer episodio en DVD, sembrando las semillas de lo que probablemente será una serie tan detallada y pulida como su predecesora.

En el re-inventado universo de Battlestar Galactica no hay aliens ni monstruos extraterrestres. Los Cylons son robots creados por la humanidad misma, que en algún momento adquirieron conciencia y voluntad independiente, rebelándose contra sus creadores y escapando hacia el espacio. Durante décadas nada se supo de ellos... hasta su eventual y violento regreso a las Colonias en el primer episodio de Battlestar Galactica. Ahora, Caprica nos muestra la creación de esos cylons, y se centra en nuevos personajes (con algunos viejos conocidos) de algún modo envueltos en ese importante evento. Para empezar, tenemos al genio tecnológico Daniel Greystone (Eric Stoltz), cuya inmensa fortuna proviene de sus creaciones robóticas... aunque están limitadas por la ausencia de una genuina inteligencia artificial que las haga heurísticas y autónomas. Lo que Daniel no sabe es que su rebelde hija Zoe (Alessandra Toreson) está sumergida en la sórdida sub-cultura de la realidad virtual, y está construyendo secretamente una réplica digital de sí misma, que podría darle a Greystone la clave para dotar de inteligencia a sus robots militares. Al mismo tiempo seguimos al corrupto abogado Joseph Adama (Esai Morales), cuyo dolor por la pérdida de su esposa e hija lo hacen mezclarse en ciertos asuntos ilegales que oblicuamente contribuirán a la causa de Greystone. Y al mismo tiempo vemos cómo una orden religiosa politeísta oculta un núcleo de peligrosos radicales que creen en un único dios, cuya absoluta voluntad define el bien y el mal...

Suena vago, pero estoy seguro de que Moore sabe lo que está haciendo. La premisa es muy distinta a la de Battlestar Galactica, y quizás decepcione a quienes esperaban otro banquete de violencia, efectos especiales y ópera espacial (aunque hay sorpresivo contenido sexual, que probablemente será editado para su transmisión por televisión). Sin embargo, me permito recordar que el plato fuerte de la serie anterior fue el drama humano, y en Caprica se establecen firmes cimientos listos para sostener otra titánica estructura de causas y consecuencias, emociones y conflicto, tecnología y espiritualidad. En resumen, espero con ansia el comienzo de esta nueva serie, cuya primera labor será cumplir las elevadas expectativas que este primer episodio genera. Las actuaciones son perfectas; el diseño del mundo es fascinante; y su potencial es casi infinito. Esperemos que Ronald D. Moore y su equipo vuelvan a lograr lo imposible; por lo que he visto en Caprica, confío en que así será.
Calificación: 9

4 comentarios:

CESAR dijo...

Para los fans "desquisiados" de GALACTICA en los cuales me incluyo.. será una especie de triste consuelo.. ya q como lo dices ya no es una opera espacial.. veremos..

chau..

Pablo del Moral dijo...

César: A mi también me hubiera gustado más naves, DRADIS y demás, pero como dice Ron Moore, lo mejor de Battlestar Galactica eran los personajes, independientemente del entorno en el que estuvieran. Por eso siento mayor optimismo por Caprica. Además, tienen suficiente ciencia ficción (entornos virtuales, ROBOTS!) para satisfacer mi nerd interno. ¿A quién engaño? No hay diferencia alguna entre mi nerd interno y el externo. Muchos saludos y suerte!

Anónimo dijo...

los cyons en la version original de galactica tambien son robots nomas que mitad hombre mitad maquina
Camila R.

Pablo del Moral dijo...

Camila: Creo que no me expresé bien. Sé que los Cylons eran robots; lo que quise decir es que antes eran extraterrestres y ahora no. Mis disculpas por la confusión y muchos saludos.