martes, 6 de marzo de 2012
Justice League: Doom
Las personas de mi generación probablemente recordarán con afecto (o al menos irónica nostalgia) las caricaturas de los Super Amigos (Super Friends), una especie de versión infantilizada del comic Justice League (o alguna de sus variantes), donde Superman, Batman, Wonder Woman y otros (que será mejor olvidar) combatían amenazas cósmicas y desafiaban los malévolos planes de ineptos super-villanos, muchos de ellos trabajando bajo el auspicio de la Legión del Mal (Legion of Doom), cuya guarida en lo profundo de un pantano se convirtió en uno de los más memorables elementos de la serie. Ahora, en la nueva película animada Justice League: Doom, el escritor Dwayne McDuffie rinde afectuoso tributo a aquella venerable caricatura, resucitando la Legión en una historia que toma prestados elementos de la novela gráfica Justice League: Tower of Babel. El resultado, desafortunadamente, no fue tan bueno como otras cintas de DC Comics... pero aún así ofrece suficientes ideas interesantes y dinámica acción para satisfacer a los más indulgentes fans del "Universo Animado" de Warner Bros.
La trama comienza con el audaz asalto a una joyería, lo cual sería un crimen de poca monta que no requiere la presencia de la Liga de la Justicia; pero los ladrones están usando un extraño aparato extra-dimensional para pasar a través de superficies sólidas, y los héroes están interesados en saber quién está distribuyendo tecnología tan avanzada entre el mundo criminal. Sin embargo el robo resulta ser una distracción para lograr que el villano Mirror Master (voz de Alexis Denisof) se introduzca a la Bati-Cueva, donde roba importante información de la computadora de Batman (voz de Kevin Conroy), la cual será usada por el inmortal Vandal Savage (voz de Phil Morris) y los miembros de su Legión del Mal para poner en marcha un plan infinitamente perverso y catastrófico. ¿Logrará la Liga de la Justicia impedirlo a tiempo, incluso cuando existen graves problemas en sus propias filas?
Las ideas centrales de Justice League: Doom me parecieron excelentes. El plan de Vandal Savage, su metódico ataque a los héroes, y su motivación para "conquistar al mundo" (o lo que quede de él) me parecieron realmente épicos... el tipo de argumento que distingue las mejores aventuras literarias de la Liga de la Justicia (vale decir que la historia original Tower of Babel fue escrita por Mark Waid en el comic Justice League, cuando recién había terminado el aclamado reinado del escritor Grant Morrison... en otras palabras, Waid estaba haciendo su mejor esfuerzo por llenar unos zapatos bastante grandes). Y, bueno, aunque el libreto del finado Dwayne McDuffie se aleje bastante de dichos comics, preserva sus mejores elementos, al mismo tiempo que moderniza la vieja Legión del Mal para encajar mejor en la continuidad contemporánea. Lo que no me gustó tanto fue la caracterización de los personajes. Para que funcione el plan de Vandal Savage, los héroes deben cometer errores imperdonables y reducir sustancialmente su inteligencia. Además, incluso con menos de ochenta minutos de duración (incluyendo créditos finales), Justice League: Doom se siente lenta durante su primera mitad, dedicando demasiado tiempo al mencionado asalto a la joyería, y muy poco a la interacción de los héroes, lo cual fue el elemento más disfrutable en previas cintas animadas como Superman/Batman: Public Enemies, Superman/Batman: Apocalypse o, mi favorita, Justice League: The New Frontier (que sigue siendo el estándar contra el cual mido todas las películas de DC Comics).
Por el lado amable, tenemos el semi-triunfal regreso de las voces originales de Batman y Superman, Kevin Conroy y Tim Daly, respectivamente, acompañados por algunos viejos conocidos y nuevas adiciones que hacen "justicia" (jo, jo) a sus respectivos personajes. En particular me gustaron Carl Lumbly como Martian Manhunter (¿cuándo van a darle su propia película?), Nathan Fillion como Green Lantern (lástima que lo pinten como un inepto), y Claudia Black como Cheetah (para fans de Farscape). Por su parte, el veterano Phil Morris es un eficiente Vandal Savage, empapando cada palabra con el desprecio que obviamente siente por la humanidad tras haber sido testigo durante miles de años de las atrocidades cometidas en nombre de la "civilización". En cuanto a la animación, me temo que estamos en territorio definitivamente "low budget", con secuencias de acción demasiado rígidas y escenarios muy "planos" (aunque mejora un poco durante la gran pelea final). Pero bueno... ese es el precio que debemos pagar para mantener vivo el Universo Animado de DC Comics, el cual ha resultado más satisfactorio globalmente para fans de los comics, que las costosas películas de acción viva con estos mismos personajes. Entonces, aunque se encuentre por debajo del promedio, puedo recomendar Justice League: Doom por sus buenas ideas y su valor nostálgico, aunque su ejecución decepcione a quienes esperábamos la calidad de All Star Superman o Batman Year One (ya no digamos The New Frontier o Crisis on Two Earths). Y, claro, el relativo tropiezo de Justice League: Doom no ha empañado para nada mi entusiasmo por la futura adaptación de The Dark Knight Returns... como había dicho antes, ese es el Batman que realmente estoy esperando.
Calificación: 7
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1 comentario:
Julio Lando: Pues no me suena familiar la película, pero después de investigar un poco creo que podría tratarse de Prophecy, dirigida en 1979 por John Frankenheimer. Te dejo tres ligas de YouTube donde puedes ver algunas escenas de la cinta, a ver si es la que mencionas:
http://goo.gl/aC7W8
http://goo.gl/qVre4
http://goo.gl/Ude7c
Ojalá le haya atinado. Saludos y suerte!
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