sábado, 20 de junio de 2009

La Propuesta (The Proposal)

Muchas veces he admitido odiar las comedias románticas, y no es sólo por la cansada fórmula que siguen, ni por el sentimentalismo artificial con el que buscan promover arcaicos y poco realistas estándares de "romance"... bueno, esas son excelentes razones para odiarlas. Sin embargo, más importante aún es que se hacen llamar "comedias" pero rara vez son genuinamente graciosas. Y no me refiero a la hueca "gracia" de las obligatorias humillaciones públicas que el protagonista debe afrontar para ganar el corazón de su amada; ni al barato "slapstick" con tropiezos, caídas y pastelazos. Me refiero al humor real, no necesariamente inteligente, pero honesto, que nos haga reír porque queremos, y no porque nos sintamos obligados a hacerlo, como robots condicionados por las risas grabadas de los sitcoms norteamericanos.

Por eso me gustó
La Propuesta. Porque me hizo reír. No a carcajadas, pero algo es algo.

Por lo demás, la película no podría ser más previsible: La poderosa editora Margaret Tate (Sandra Bullock) tiene aterrorizados a los empleados de una prestigiosa casa editorial en Nueva York. El más sufrido de sus vasallos es Andrew Paxton (Ryan Reynolds), asistente eficiente y discreto que tolera a su odiosa jefa por la vaga promesa de un importante ascenso. Entonces, cuando Margaret recibe la inesperada noticia de que será deportada a su nativa Canadá por un problema con su visa de trabajo, decide implicar a su fiel ayudante en un plan absurdo e ilegal: contraer matrimonio para ganar la ciudadanía norteamericana y conservar su empleo. A cambio, le dará a Andrew la promoción que tanto espera. El joven se resiste al principio, pues como cómplice de un crimen federal podría ser severamente castigado. Pero la astuta Margaret logra persuadirlo y deciden pasar unos días en Alaska, con la familia de Andrew, donde anunciarán su "compromiso" y podrán conocerse a fondo, lo cual es indispensable para aprobar el examen del Servicio de Inmigración que investiga la validez de tales matrimonios. El problema es que Margaret se muestra arrogante y exigente, mientras que Andrew es sencillo y accesible... obviamente son incompatibles, y nada podrá acercarlos románticamente... ¡¿o sí?! ¡Qué suspenso!

Es fácil burlarse de Sandra Bullock y su larga cadena de comedias románticas apenas distinguibles por la variedad de galanes que la persiguen. Pero no se puede negar su natural atractivo y su chispeante personalidad, que la hace inmediatamente agradable para el público, sobre todo cuando su atolondrada actitud la pone en posiciones absurdas y graciosas. Como cualquier actor, está sujeta a la calidad del libreto que interpreta, pero en muchas ocasiones Bullock ha rescatado cintas genéricas con la pura fuerza de su presencia. Exactamente lo mismo puedo decir de Ryan Reynolds, cuya larga lista de mediocres películas tienen una cosa en común: Reynolds ha sido la mejor parte de ellas. Su espontáneo y cínico humor le confieren un atributo soñado por muchas estrellas: lograr ser atractivo para las mujeres y simpático para los hombres.

Aclaro que no los considero buenos actores... sin embargo ambos saben elegir papeles que encajan en su rango de aptitud, y por eso su desempeño es consistentemente agradable... como lo demuestra La Propuesta. El libreto no es nada original (¿alguien dijo Green Card?), pero dentro de su trillada historia logra distribuir bastantes situaciones que explotan el talento de la pareja; en otras palabras, las partes individuales de la película funcionan mucho mejor que la experiencia total. Claro que no todas sus partes son afortunadas; hay un par de secuencias que causan irritación o aburrimiento (como un forzado baile nativo en el bosque, o la innecesaria conclusión en las oficinas de Margaret). Pero también hay abundantes escenas cuyo humor proviene de la personalidad de la pareja, y no de los desvaríos impuestos por el libreto. Y aunque no soy experto, creo que esa es la marca de una buena comedia, independientemente de su argumento.

Quizás haya gente que aprecie La Propuesta por el romance de la película; por el beso que enciende el inesperado amor entre Margaret y Andrew; por las conversaciones que muestran la evolución de sus sentimientos; o por el "gran gesto" que resuelve todos los problemas y sella su destino. Confieso que todo eso me tiene sin cuidado; no obstante siento necesario recomendarla porque me divirtió el dinámico trabajo de Sandra Bullock y Ryan Reynolds, nuevamente rescatando una historia que no lo merece. Pero si algo he aprendido después de ver tantas comedias románticas, es que son como el matrimonio: es mejor aferrarse a las partes buenas para sobrellevar las partes malas.
Calificación: 7.5

3 comentarios:

Alvaro dijo...

En verdad que admiro tu paciencia para este, muy pocas comedias románticas me han gustado ...Supongo que a este género nunca le va a faltar público (Al igual que el cine gore y la comedia estudiantil) aunque no hay muchos títulos que destquen(A ver: "Nothing Hill", "Realmente Amor" y...No se me ocurre otra. A menos que "Un Gran Chico" cuente como comedia romántica. ¿Cuenta?

Emilio Alejandro dijo...

Sinceramente yo no soporto a reynolds... perdon pero sus gestos me parecen despreciables... he dicho..

Hola Pablo!!!

Cuando tiempo sin escribir... de casualidad te gusta leer a Jalife?

Suerte!

Pablo del Moral dijo...

Álvaro: Tienes razón. About a Boy es una buena comedia romántica que encuentra un modo ingenioso para desviarse de la fórmula y aún así entregar un final satisfactorio. Me dieron ganas de verla de nuevo... Muchos saludos y suerte!

NaNcY bOy: Hola! Espero que estés bien y que sigas disfrutando el cine, especialmente en esta abundante temporada veraniega. En cuanto a Reynolds, también me pareció insoportable en su obra temprana (como Van Wilder), pero con el tiempo empecé a apreciar su sarcástico sentido del humor, y para cuando vi "Waiting" ya era fan. En cuanto a Jalife, no sabía quién era hasta que me hiciste la pregunta. Trataré de leer algo de lo que encuentre en linea. Muchos saludos y bienvenido de nuevo!