viernes, 19 de octubre de 2012

Mentiras Mortales (Arbitrage)

En vista de su título original ("Arbitraje") y su distinguido elenco, yo esperaba que Mentiras Mortales sería una versión "Hollywood" de la interesante cinta independiente Margin Call. En otras palabras, una denuncia dramatizada sobre la desmedida ambición de los "peces gordos" de Wall Street, y las malas decisiones que llevaron al colapso económico del año 2008. Y, en efecto, la cinta cubre parcialmente esos temas; sin embargo el énfasis del argumento gira en torno a una fórmula más convencional de thriller, únicamente interesante por el sólido trabajo de sus actores. Si no fuera por ellos, Mentiras Mortales podría haber sido un melodrama televisivo anónimo e inmediatamente olvidable.

El protagonista es Robert Miller (Richard Gere), dueño y director de una importante firma financiera neoyorquina que está a punto de ser adquirida por una empresa transnacional, lo cual hará inmensamente ricos a Miller y sus inversionstas. Sin embargo (como siempre ocurre en negocios de este tamaño), las cosas no son lo que parecen, pues en realidad la firma está al borde de la bancarrota, y la única manera de simular solvencia económica es por medio de un préstamo secreto de más de cuatrocientos millones de dólares. Desafortunadamente el prestamista (otro titán de Wall Street) empieza a preocuparse por la operación y exige la devolución inmediata de su dinero. Entonces Miller se encuentra en una situación imposible: si regresa el dinero se descubrirá el mal estado económico de su firma y perderá al comprador; y si no lo devuelve, el prestamista podría tomar acción legal que mancharía su reputación, lo cual también cancelaría la venta. Para empeorar las cosas, el abrumado hombre se ve envuelto en un trágico escándalo que podría llevarlo a presidio, y de paso arruinar su matrimonio con Ellen (Susan Sarandon). Y así es como Miller se ve obligado a mentir, traicionar y usar todas las mañas posibles para escapar su inevitable destino. ¿Triunfará el dinero o la justicia?

La tendencia del "thriller financiero" parece seguir vigente, y Mentiras Mortales sin duda pertenece al mismo nicho de cintas como The International y Wall Street: Money Never Sleeps, así como la mencionada Margin Call; sin embargo el director y guionista Nicholas Jarecki tuvo el acierto (o cometió el error, según preferencias del espectador) de poner el dinero en segundo plano, centrándose en el melodrama y suspenso del protagonista enfrentando múltiples crisis en todos los aspectos de su vida. Al presentarlo como una persona de dudosa conciencia y cuestionable comportamiento, Jarecki crea una curiosa disyuntiva moral para el público... ¿queremos que Robert Miller se salga con la suya, o que sea castigado por sus múltiples transgresiones? El número de actores que podrían navegar exitosamente estos altibajos éticos es muy reducido, y afortunadamente Richard Gere es uno de ellos (supuestamente reemplazando a Al Pacino, quien abandonó el proyecto antes de comenzar la filmación). Su capacidad para conservar la simpatía del espectador es impresionante, ya sea que esté cometiendo fraudes millonarios, engañando a su esposa, o mintiendo desvergonzadamente al policía que está obsesionado con su arresto. No niego que Gere sea un buen actor, pero creo que su talento principal es esa conexión que logra con la audiencia, preservando la humanidad e integridad de sus personajes hasta en cintas mediocres. Esa es la marca de una genuina estrella de cine.

El resto del elenco está a la altura del protagonista. Susan Sarandon maneja muy bien su papel de esposa devota que quizás sepa más de lo que aparenta. Brit Marling es tan convincente como siempre en su interpretación de la hija y socia de Miller, que ni siquiera imagina los taimados manejos de su padre; y Tim Roth es el policía dispuesto a sacrificar su carrera para atrapar al "pez gordo", pues sabe que las leyes no funcionan igual para miembros de las altas esferas financieras. El director aprovecha bien a su elenco y conduce la película con un estilo sobrio, visualmente atractivo pero sin afectaciones nocivas; y su libreto incorpora adecuadamente suspenso, melodrama familiar y el mínimo necesario de jerga financiera para sentirnos parte de la "elite" bancaria. A fin de cuentas no sé si Mentiras Mortales trató de ser una cínica farsa sobre las "hazañas" de un anti-héroe perteneciente al 1%, o una tardía acusación de los vicios capitalistas que perjudicaron las vidas de millones de personas alrededor del mundo. Como sea, cumple su misión de entretener, ponernos a pensar un poco, y cuestionar si algunas de esas fallidas decisiones económicas fueron "males necesarios" para evitar un perjuicio mayor (aunque para explorar estos temas yo recomendaría algunos de los excelentes documentales realizados desde el 2008). Entonces, Mentiras Mortales merece una recomendación como frívolo entretenimiento adornado por un delgado barniz de relevancia social; pero definitivamente debió ser más profunda y analítica para tomarse en serio en el contexto de las finanzas contemporáneas. Claro que resulta más fácil y divertido centrarse en "los problemas de los ricos"... después de todo, las telenovelas llevan décadas con esa premisa y siguen tan exitosas como siempre.
Calificación: 8

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Pablo,

he notado que tus críticas llegan a diferir enteramente de críticos famosos (omitiré decir nombres para no quemarlos). Por ejemplo, uno de esos críticos le dio a Arbitraje 4 estrellas, diciendo que "no solo es un gran triller, sino una demostración convincente de como los más ricos pueden [...] (hacer lo que hace al final de la película, para no caer en spoilers)". Pues bueno, después de leer ambas críticas, creo que me gusta más la tuya, pues no entra tanto en los detalles de la película, sino da una verdadera crítica de su producción. De hecho, creo que al mencionado crítico le gustó la película porque va acorde a su ideología, mientras que tu has hundido en el agujero más profundo películas que van más acorde a la tuya.

Bueno, felicidades por tu crítica y saludos!

Anónimo dijo...

Que chistoso que viste the Sound of my Voice y luego Arbitraje, las 2 con Brit Marling

Pablo del Moral dijo...

Anónimo: Muchas gracias por tus amables palabras. En efecto, casi siempre trato de ser tan objetivo como sea posible, y no dejar que mi ideología personal altere (demasiado) la crítica de una película. Sé que no siempre lo consigo, pero al menos lo intento ;-) Muchos saludos y feliz semana!

Anónimo 2: Sí, fue una curiosa coincidencia. Desde luego sabía que Brit Marling salía en Sound of My Voice (de hecho esa fue la razón por la que me interesaba verla), pero fue una sorpresa encontrarla en Arbitrage. Una de esas pequeñas sincronías de la vida ;-) Saludos y suerte!