Desde luego me da gusto presenciar el renacimiento creativo de Woody Allen, pero no tenía fe ciega en tal fenómeno. Cierto, la aclamada Match Point marcó el inicio de una nueva etapa en la carrera de un director que hasta hace pocos años parecía haber extinguido la flama de su genio (especialmente después de la intolerable Anything Else)... pero cuando Match Point fue seguida por la frívola comedia Scoop, pensé que el entusiasmo nos había durado poco. Afortunadamente después llegó la intensa Cassandra's Dream y ahora Vicky Cristina Barcelona, con la cual regresamos al genial Allen de antaño pero en una faceta más madura, aún capaz de crear personajes fascinantes y ubicarlos en circunstancias que no sólo resultan interesantes, sino que examinan acertadamente las volubles relaciones humanas y su difícil conciliación con lo que entendemos como “felicidad“.
Como someramente anuncia el título, Vicky Cristina Barcelona sigue las aventuras de Vicky (Rebecca Hall) y Cristina (Scarlett Johansson) en Barcelona, donde pasan un verano mientras la primera concluye sus estudios de historia catalana. Las mujeres son buenas amigas, pero con actitudes totalmente opuestas y por eso, cuando el sofisticado artista Juan Antonio (Javier Bardem) les sugiere compartir un sensual fin de semana, Vicky se escandaliza mientras que Cristina acepta con entusiasmo la oferta. Sobra decir que ese fin de semana desata una serie de eventos que no sólo afectará los planes de las amigas, sino que posiblemente las cambiará para siempre, alterando la perspectiva con la que enfrentan la vida.
Hay gente que prefiere al Woody Allen que hacía traviesas comedias con excéntricos personajes que emulaban el estilo y ritmo del cine de los 30s y 40s; otros prefieren al Allen profundo y contemplativo que realizó sobrios dramas donde la dinámica romántica y familiar era fríamente analizada por personajes inteligentes y en ocasiones despiadados. Pero finalmente, tal vez gracias a su "segundo aire", Allen logró combinar ambos enfoques con excelente resultado. Vicky Cristina Barcelona tiene pasajes bastante graciosos, pero nunca son a costa de la dignidad de sus personajes, y el análisis que hace de sus relaciones románticas y de su visión de la vida resulta fascinante y honesto, aunque no se ajusta necesariamente a lo que mucha gente consideraría como "normal" o "aceptable". Esa es la madurez a la que me refería al principio. Allen siempre se mostró interesado en diseccionar la relación de pareja, pero sin lograr trascender la clásica "guerra entre los sexos". Vicky Cristina Barcelona añade niveles adicionales a ese análisis, y aunque el resultado sea aún más ambiguo, también se siente mucho más honesto y realista. En otras palabras, en vez de buscar culpables por las fallas en una relación, esta vez la cinta acepta la complejidad de la batalla misma, donde el conflicto interno es tan difícil como el externo.
Pero a fin de cuentas, Vicky Cristina Barcelona no es una sesión de terapia de parejas, sino una película perfectamente estructurada y muy entretenida, adornada con un brillante elenco que ofrece actuaciones sinceras y creíbles en el atractivo entorno de Barcelona, luciendo (de manera sutil pero constante) sus mejores atributos, desde la arquitectura de Gaudi hasta sus pintorescas calles, restaurantes y parques (cosa que sin duda hará muy feliz a la Oficina de Turismo de esa ciudad). Mi expectativa sobre la película era moderadamente baja, y quizás por eso la disfruté tanto, aunque debo confesar que el uso de un narrador me pareció artificial e innecesario, como si Allen hubiera tenido pereza de escribir escenas que mostraran lo que la omnisciente voz nos describía. Sin embargo, al final me di cuenta de que resultó ser una útil herramienta para agilizar la narrativa y mantener la historia en constante movimiento, evitando pesadas escenas explicativas que hubieran robado energía de la trama principal.
Como sea, Vicky Cristina Barcelona es la cinta que más me ha gustado en la nueva etapa de Allen, y confío en que su obra siga mostrando el mismo control sobre los elementos humorísticos y dramáticos, conjugado con su aguda visión y preciso análisis de la humanidad. Allen siempre me ha parecido un director interesante, pero ahora estoy cerca de considerarlo indispensable, y prometo no dudar más de su renacimiento... al menos hasta que vuelva a trabajar con Jason Biggs.
Calificación: 9
lunes, 8 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
8 comentarios:
VAYA QUE RECOMENDACION LA VOY A RENTAR MAÑANA MISMO
NO ESTA EN RENTA TODAVIA, ESTA EN CARTELERA.
ES BUENA, AL PRINCIPIO SI CAE PESADO LA NARRACION, Y LA VOZ DE LA HALL, PERO LUEGO SE VAN ACOPLANDO CON LA PELI, Y BARDEM Y PENELOPE, LA HACEN MUY BIEN.
VAYA TITULO QUE LE PUSIERON LOS TRADUCTORES DE MEXICO, SE PASARON MUCHO, Y NO ES LA PELICULA MAS SENSUAL DE ALLEN COMO DICEN POR AHI, ES NORMAL EL MANEJO DE LA SENSUALIDAD, CREO QUE EN MATCH POINT HABIA MAS SENSUALIDAD DE SCARLET.
ALLEN HACE PELICULAS DIGNAS, Y ENVEJECE CON DIGNIDAD, NO SE VENDE O SE MALVENDE, COMO OTROS DIRECTORES LUCAS, SPIERBELG, SINO VEAN LO QUE HACEN A INDIANA Y SUS CLONES.
ESTE ALLEN, CADA AÑO NOS TRAE ALGO BUENO, Y SINO AL MENOS MUERE EN EL INTENTO.
Casas: Ojalá la puedas ver en el cine, pero realmente creo que no perderá mucho esperando viéndola en DVD, si así te acomoda más.
Anónimo: Coincido con tu opinión sobre traducción del título. Supongo que los distribuidores apoyan la teoría de que el nombre de la película debe describir su argumento... y, bueno, quizás así funciona mejor para algunas películas, pero eso no le quita lo ridículo a los títulos que se inventan. Muchos saludos.
Debo decir, gratamente, que este film me ha sorprendido. Parece que a Woddy este segundo renacer creativo en Europa le a sentado muy bien. La pelicula me parecio ingeniosa e inteligentemente divertida, es un Allen puro, los personajes son el centro de la acción al igual que la narrativa. Debo confesar que me parecio un poco lenta al principio, seguramente por el relato, pero luego crecio en intensidad. Saludos...
Claudio: Yo tuve una reacción similar; al principio me irritó el narrador, pero eventualmente reconocí su utilidad. Ojalá Allen siga esta curva ascendente por muchas películas más.
Ayer en la noche tuve una cita con Vicky y Cristina, en Barcelona. ¡Ya quisiera yo! Mentira, ayer tuve una cita con Allen, a quien le perdono las dos transiciones de estilo Bond. Por lo demás, grandiosa la mirada de las relaciones humanas, de la vida afectiva y sexual, de los riesgos que implica desestabilizar lo estable, tratar de estabilizar los inestables. Admito que –al contrario tuyo- en ningún momento me molesto el narrador en off, me parece grandioso que te cuenten las historias, como cuando te contaban cuentos, claro que debo decir que en muchas secuencias las palabras me decían lo que las imágenes hacían evidente, como quien recuenta. Ágil, humana y sensual es la película en la que María Elena llega a enamorar.
Alejandro: Muy buena descripción de la película... "estabilizar lo inestable"... ojalá se me hubiera ocurrido a mi ;-)
Publicar un comentario