Blancanieves y el Cazador (Snow White and the Huntsman)

Oficialmente perdí entusiasmo por esta moda de "re-imaginar" cuentos de hadas para generaciones modernas. Por muchos monstruos, anti-héroes y melodrama "dark" que introduzcan a estas tradicionales historias, el resultado tiende a ser demasiado rebuscado, carente de gravedad narrativa y solo marginalmente entretenido. Pero, eso sí, siempre son visualmente impresionantes para distraernos de sus huecos personajes y prefabricadas estructuras. Blancanieves y el Cazador sigue puntillosamente esa fórmula, transformando a Blancanieves en una heroína de acción y creando nuevos personajes que sirven como relleno, "comic relief" o simple carne de cañón. En otras palabras, una blanda fantasía "goth" que quizás complacerá al sector más tolerante del público, pero será inmediatamente olvidada por quienes buscábamos una experiencia más sustanciosa.

Érase una vez un Rey y una Reina benévolos y generosos que tuvieron una niña de piel tan blanca y labios tan rojos que la nombraron Blancanieves. Desafortunadamente la Reina falleció unos años después, y el Rey Magnus (Noah Huntley) se casó con Ravenna (Charlize Theron), sin darse cuenta de su naturaleza traicionera y sus malignos poderes mágicos. Viendo la oportunidad de apoderarse de la corona, Ravenna asesinó al Rey y encerró a Blancanieves en un calabozo. Diez años después el Reino ha caído en la ruina, el bosque está lleno de monstruos y la gente vive aterrorizada por los frecuentes secuestros de doncellas, que la Reina usa secretamente como fuente de juventud y belleza (o como ingrediente de salsa tártara… la mitología de la cinta no es muy clara). Pero la vanidad de Ravenna se ve amenazada cuando el espejo revela la existencia de una joven más hermosa que ella: Blancanieves (Kristen Stewart). Y eso no es todo; el espejo dice que la muchacha guarda el poder de la juventud eterna; entonces la Reina ordena que se la lleven de inmediato para extraerle el corazón. Sin embargo Blancanieves aprovecha la oportunidad para escapar del castillo e internarse en el bosque, donde tiene pocas probabilidades de sobrevivir entre tantos peligros. Furiosa por el escape de su prisionera, Ravenna manda buscar a el Cazador (Chris Hemsworth), el mejor rastreador del Reino (o al menos lo fue hasta que empezó a emborracharse para olvidar la muerte de su esposa) y le exige que encuentre a Blancanieves; a cambio revivirá a su esposa fallecida. Y así emprende el Cazador la búsqueda de la muchacha sin saber que se trata de la legítima heredera de la corona...

A decir verdad, creo que Blancanieves y el Cazador no es realmente mala; simplemente estéril y genérica. Por el lado amable, el director Rupert Sanders tiene buen ojo para los efectos especiales, y no nos satura hasta el punto del hastío, como ocurrió con otras películas similares (aunque el efecto del "espejito mágico" me pareció sobre-diseñado e innecesario). Y si bien el guión tiene momentos flojos, en general su ritmo es ágil y se nota un vago esfuerzo por dar apropiada motivación a los personajes, así como el esperado "arco dramático" que los hace evolucionar a lo largo de la película. Habiendo dicho eso, no hay nada original en la trama, y parece estar armada con los módulos intercambiables que ya conocemos: el villano (o villana) mostrando su maldad en una víctima inocente; la heroína que demuestra (de la nada) ser una feroz combatiente; el elocuente discurso para inspirar valor en las tropas; el anti-héroe con un pasado tortuoso que debe probarse a sí mismo; el sabio anciano que sabe más de lo que dice... en fin, cualquiera que haya visto una película de fantasía (o leído un libro del género) podrá adivinar por anticipado el desarrollo de cada escena. Como dije, eso no hace la cinta intrínsecamente mala, pero nos roba la emoción del suspenso y la catarsis de sentir que la protagonista vence obstáculos insuperables gracias a su temple, y no simplemente porque es la actriz principal de la película.

Pero, ¿es la actriz principal? Obviamente no esperaba mucho de Kristen Stewart como actriz, y no me decepcionó; en casi todas las escenas nos deleita con su rango de dos expresiones, las cuales podrían describirse como angustia confusa y confusión angustiada. Yo hubiera preferido una actriz más expresiva, que pudiera capturar sin palabras el peso del deber y el carisma de una líder (dado que al final de la película es más Juana de Arco que Blancanieves), pero bueno... entiendo que Stewart fue una apuesta más segura en lo que respecta al éxito de taquilla. Por su parte, Charlize Theron explota en el papel de Reina villana y se da gusto gritando sus díalogos y rechinando los dientes; aún así es la única que se siente realmente viva y presente en la película. Chris Hemsworth es un adecuado anti-héroe, duro por fuera y chicloso por dentro. Los "enanos" están interpretados por un desfile de buenos actores británicos (como Bob Hoskins, Ray Winstone y el genial Nick Frost), aunque honestamente me pareció un poco ofensivo que los "enanizaran" por medio de efectos especiales, en vez de contratar actores con el físico correcto.

En fin... vi la película hace apenas un par de horas y mi cerebro ya está fusionándola con Alice in Wonderland (otro cuento que tampoco necesitaba una gran batalla al final), Mirror, Mirror, (menos seria y más aburrida) y Red Riding Hood (con todo y su insoportable "romance"). Hablando de lo cual, admiro que Sanders y sus escritores hayan mostrado considerable disciplina con el ángulo romántico de la historia; está bien manejado y afortunadamente se abstienen de restregarlo en nuestras caras. Entonces, no me arrepiento de haber visto Blancanieves y el Cazador, y aunque me cuesta trabajo recomendarla con mucho entusiasmo, reconozco que cuenta con suficientes atributos (especialmente en sus imágenes) para pasar un rato de inofensiva diversión con el más leve toque "dark" para convencer al público infantil de que vieron una película profunda y madura. Además, esta cinta podría establecer un estándar ligeramente más elevado para futuros cuentos de hadas modernizados, como Hansel and Gretel: Witch Hunters, Pan, y el supuesto Pinocho de Guillermo del Toro, si es que alguna vez tiene tiempo de realizarlo. En resumen: mordí la manzana y viví para contarlo. Pudo ser peor.
Calificación: 6.5