sábado, 17 de diciembre de 2011

Inmortales (Immortals)


Hace veinte años me asombró la novedosa estética visual que el artista y director Tarsem Singh empleó en algunos memorables videos musicales y comerciales de los noventas. Sin embargo, cuando Singh finalmente dirigió una película resultó ser un desastre narrativo, pero, eso sí, repleto de impresionantes imágenes que aún perduran en mi memoria. Algunas personas opinaron que el estilo visual de The Cell bastó para hacerla una buena película, pero no me encuentro entre ellos (aunque respeto su opinión). Y sospecho que ocurrirá lo mismo con Inmortales, nueva cinta de "acción mitológica" con la que Singh pretende triunfar donde fracasaron Conan the Barbarian y el re-make de Clash of the Titans. ¿Lo consigue? Creo que no, pero eso no le impide ser entretenida y, desde luego, visualmente impactante.


El argumento de Inmortales emplea una densa sopa de mitología griega para contarnos la historia de Theseus (Henry Cavill), un virtuoso y valiente hombre involucrado accidentalmente (¿o será voluntad divina?) en la cruzada del maniático Rey Hyperion (Mickey Rourke), quien pretende liberar a los Titanes de su eterna prisión bajo el Monte Tartarus para que eliminen a los Dioses del Olimpo, sus enemigos mortales (o, mejor dicho, inmortales, jo, jo). Y si Hyperion logra capturar en el caos de la batalla una poderosa arma que le permitirá dominar el mundo, pues qué mejor.


Asumo que cuando Tarsem Singh vio 300 la tomó como una afrenta personal y un reto para superarla en todos sentidos. Y eso es lo que intentó con Inmortales... otro refrito del género "peplum" (también conocido como "cine de sandalias y espadas") filtrado a través de una sensibilidad hiper-artística y rebuscada, que no quedó satisfecha hasta que cada pixel de la pantalla fuera opulentamente sobre-diseñado (en color dorado, de preferencia), y cada pelea fuera elegantemente coreografiada en cámara lenta, con mórbida atención a cada chorro de sangre y a cada músculo de los varoniles guerreros griegos que, en distintas circunstancias, no estarían fuera de lugar como "backup dancers" en algún aparatoso video de Lady Gaga.


En lo que respecta a la historia, podemos esperar las habituales fórmulas empleadas como un fin por sí mismas, y no como herramientas para contar una historia coherente. Desafortunadamente Singh muestra tan poco interés en el desarrollo de los personajes que hasta los más rimbombantes clichés se sienten blandos y carentes de energía, ya sea la pelea inicial entre Theseus y los soldados (para demostrar que es un tipo sensible, pero sabe defenderse cuando insultan a su mamá), o los trémulos monólogos de Hyperion, tan ridículamente solemnes y confusos que sus víctimas seguramente dan gracias cuando el obsesionado rey finalmente se digna matarlos. Por cierto, me temo que este no es el Mickey Rourke de The Wrestler, sino el bizarro hermano gemelo que vimos fuera de control en Iron Man 2 y Domino.


Y ya que estoy quejándome de los actores, necesito expresar mi temor por el papel (o papelón) que hará Henry Cavill como Superman en un par de años. Sin duda tiene rostro esculpido en granito y cuerpo de atleta griego... pero, caray, hasta en las más intensas escenas parece un recorte de cartón, incapaz de transmitir sus emociones al espectador (esperen a ver su discurso inspirador antes de la gran batalla... ¿"Pelearemos por los niños"? Sparta, tenemos un problema). Sinceramente espero que Zack Snyder sepa lo que está haciendo. En fin, volviendo al punto, el resto del elenco de Inmortales (con la posible excepción de John Hurt) se limita a repetir sus líneas y servir como maniquíes vivientes para lucir los caprichos de alta costura de Singh, quien prefiere usar el cuerpo humano como elemento de diseño, y no como vehículo de personajes con los que pudiéramos identificarnos.


Sin embargo, como dije al principio, el derroche de estilo en Inmortales es tan abrumador y la acción tan sangrienta que podría distraernos durante casi dos horas, siempre y cuando nuestro cerebro coopere y abandone la esperanza de ser estimulado por una historia interesante. Entonces, si les parece atractiva la idea de ver una película que combina a Frank Frazetta con el más extravagante “pictorial” de Vanity Fair, vean Inmortales, y quizás terminarán apreciando sus virtudes superficiales. Solo recomiendo llevar al cine algo para leer durante los tediosos diálogos. Excepto lo de Mickey Rourke... esos son el "comic relief" y no hay que perdérselos.
Calificación: 6

6 comentarios:

Alvaro dijo...

Tal parece que, después de 300 y Sin City, las películas que buscan ser visualmente "espectaculares" tienen que ser ser bastante "irreales" y usar bastante CGI ¿No? A mí la película de Tarsem Singh que más me gustó fue "The Fall" que sí poseía un estitilo visual muy hermoso (Y prácticamente sin usar efectos hechos por computadora)
Si este director combinase su exhuberante estilo visual con un buen guión, podría hacer una auténtica obra maestra, pero por lo poco que pude ver de su siguiente película (Una especie de versión "glamorosa"/paródica de Blancanieves) se ve que Singh le sigue dado más peso al aspecto visual que a la narrativa...En fin, supongo que terminaré viendo esta película de todos modos...

Anónimo dijo...

Historia parecida a Furia De Titanes check!, peleas y coreografias estilo 300 check! y escenas que se usaron en Troya check!. Al mezclar todos estos ingredientes da como resultado Inmortales. Si quiero decir que entretiene y que los efectos visuales son muy buenos pero yo creo que el problema esta en la historia que es un poco floja, a ratos se me hacia lenta porque la accion tarda en hacer acto de presencia, pero la verdad es que aun con estos detalles si es mas o menos buena, en mi opinion no le llega a 300 pero es mejor que Furia De Titanes.

zombidromo dijo...

a mi los metrosexuales héroes, la verdad me fastidian verlos, y ya le diste una buena idea a tarsem singh, pablo¡¡ en su próxima película le dará un rol a esa cantante que mencionas, de seguro le subirá la taquilla.

Pablo del Moral dijo...

Álvaro: Tendré que ver The Fall, entonces. Me intrigó lo que dices sobre la ausencia de efectos digitales. Saludos!

Anónimo: De acuerdo; gastaron demasiado en efectos y muy poco en el libreto. Saludos!

Zombidromo: Pues aunque no me gusten mucho las películas de T. Singh (las que he visto), creo que su talento visual se presta más para los clips musicales, donde la narrativa no importa tanto como el impacto sensorial. En ese caso, creo que definitivamente haría buena pareja co Lady Gaga. Saludos!

Anónimo dijo...

Pablo, perdón por comentar en un post tan viejo, pero realmente siento la necesidad de pedirte (y éste parecería ser el lugar más apropiado) que mires The Fall. Me pareció no sé si una de las mejores, pero definitivamente de las más memorables películas que haya visto.

Saludos!

Pablo del Moral dijo...

Anónimo: Muchas gracias por la recomendación; y es el momento perfecto, después de haber visto el "viaje" de Beyond the Black Rainbow ;-) Saludos y suerte!