El título sugiere una simple parodia, pero en realidad la película Some Guy Who Kills People tiene ambiciones narrativas más elevadas, desafiando clasificación al combinar drama, humor y terror en una historia divertida y satisfactoria que trasciende su contradicción de géneros gracias al sólido desempeño de sus actores y a un ingenioso libreto que pone énfasis en el carácter de sus personajes y en las emociones de la historia. Ojalá encontráramos más películas como ésta en el mundo "indie".
El protagonista de Some Guy Who Kills People es Ken Boyd (Kevin Corrigan), un tímido y callado individuo de treinta y tantos años que ha sufrido agresiones de "bullies" durante toda su vida, desde los jóvenes que lo torturaban (literalmente) en su época estudiantil, hasta su jefe en la fuente de sodas donde trabaja ahora... sin olvidar a su madre Ruth (Karen Black), cuyos constantes insultos pasivo-agresivos aluden al intento de suicidio que dejó a Ken internado en un hospital psiquiátrico durante varios años, lo cual solo reforzó su imagen de "loser" ante los crueles habitantes del pueblo. Eso tal vez explica los sangrientos asesinatos de individuos que lo torturaron en el pasado; sin embargo Ken encuentra un rayo de esperanza en su vida gracias al tímido romance que inicia con Stephanie (Lucy Davis), una mujer tan solitaria como él. Desafortunadamente la larga lista de víctimas han despertado las sospechas del Sheriff Fuller (Barry Bostwick), quien quizás no sea tan inepto como parece...
No es la primera película que lo intenta, pero Some Guy Who Kills People está entre las que mejor consiguen ponernos del lado del asesino, mostrando sus crímenes no como simple catarsis, sino como el último recurso de un frágil espíritu que fue destrozado por injusticias sufridas a lo largo de su vida. La actuación de Kevin Corrigan (los fans de Community lo reconocerán como el Profesor Professorson en aquel memorable episodio sobre conspiraciones) derrocha calidez y humanidad, y nos hace desear que logre encontrar la fuerza interna y motivación para superar sus traumas y encontrar la felicidad. Claro, está matando gente y quizás no estamos de acuerdo con sus sangrientos métodos, pero el tema central de la película no es venganza, sino redención.
Todo esto sería demasiado denso y sombrío si no fuera por las saludables dosis de humor que acompañan el drama y la violencia, añadiendo una atmósfera simpática y accesible que no se toma muy en serio, pero tampoco se auto-exonera por la ambigüedad moral del protagonista. Como dije al principio, el énfasis no está en las muertes ni en los chistes sino en el desarrollo de los personajes, y me alegra decir que el guionista Ryan A. Levin (veterano de la serie Scrubs) los construye con sorprendente precisión, usando estereotipos fáciles de asimilar (el perdedor simpático, la madre posesiva, el policía estúpido), pero adornándolos con detalles finamente trabajados, de modo que cobran vida propia y se sienten como personas vivientes, en vez de ser simples engranes en una historia pre-fabricada. Las actuaciones están a la altura del libreto, y creo que no hay un solo elemento débil en el elenco. Mi única queja sería que el guión cubre demasiados eventos, y a veces terminan estorbándose; y tampoco estoy seguro sobre ese "twist" final que parece previsible y demasiado conveniente; pero bueno... cumple su función de atar cabos sueltos y llevarnos a un final lógico, siempre y cuando no lo analicemos demasiado.
No obstante, el mayor "twist" de la película viene en la forma del director Jack Perez. Su trabajo en Some Guy Who Kills People me pareció impecable, manejando con igual destreza las escenas dramáticas, los momentos cómicos y el ocasional "gore" de los asesinatos. Nunca hubiera imaginado que Perez (bajo varios pseudónimos) fue también responsable por atrocidades como MegaShark Vs. Giant Octopus o Monster Island. Quiero pensar que cuando trabajó para The Asylum tuvo que atenerse a los estándares del estudio, y solo hasta ahora (¿quizás con ayuda del productor John Landis?) pudo mostrar su talento y visión, aunque fuera con un presupuesto reducido y recursos limitados. Ese tipo de "twist" definitivamente me gusta. Entonces, solo queda darle una merecida recomendación a Some Guy Who Kills People; quizás no esté al nivel de joyas "indie" como Tucker & Dale Vs. Evil o The Loved Ones, pero sin duda pertenece al nicho de "sorpresas agradables" y merece apoyo de los fans del cine fantástico cansados de secuelas y re-makes. En cuando a Jack Perez, no tendrá que usar la vergonzosa frase "Del director de MegaShark Vs. Giant Octopus", sino la más digna "Del director de Some Guy Who Kills People". Buen avance, y lo felicito por ello.
Calificación: 8.5
lunes, 6 de agosto de 2012
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7 comentarios:
Pablo, ¿cuáles son las películas que más veces has visto en tu vida?
Gracias y saludos.
Martín: En este caso tienen ventaja las películas más antiguas: Trilogía de Star Wars; Trilogía de Indiana Jones; The Day the Earth Stood Still; Quatermass and the Pit; Tron; Trilogía de Evil Dead; Dawn of the Dead; Day of the Dead; The Thing; Heathers; Can't Hardly Wait; Mallrats; DOA: Dead or Alive; Doomsday; Manos: The Hands of Fate; The Beast of Yucca Flats; Robot Monster; y Hobgoblins. Saludos y suerte!
Manos: The Hands of Fate?? Esa película es de las que más has visto en tu vida??
Ahora sí me sorprendiste!
Pablo, la película es producida por el mítico John Landis, que llevaba una década sin hacer nada interesante.
Anónimo: Bueno, vale aclarar que es la versión de Mystery Science Theater 3000. Por sí sola no sé si la resistiría una sola vez ;-) Saludos y suerte!
Anónimo: Muchas gracias por señalarlo (también mencioné a Landis en la crítica); aunque yo diría que Burke & Hare (del 2010) fue al menos un poco interesante... Gracias y saludos!
Tienes razón Pablo, ahí está Landis, puedo culpar a la lectura rápida. Un Saludo!
Anónimo: No te preocupes; yo tampoco leo las críticas ;-) Saludos y feliz fin de semana!
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