Como lo indica el subtítulo (Comienzos Sangrientos), Wrong Turn 4 es una precuela cuyo argumento comienza en 1974 con un recorrido por el hospital psiquiátrico Glenville, donde están recluidos tres hermanos físicamente deformes como consecuencia de la endogamia, y trastornados mentalmente desde que devoraron a sus propios padres. Pero no estarán internados mucho tiempo, pues un error humano libera a todos los pacientes, y se desata un brutal motín (al ritmo del Danubio Azul, nada menos), en el que toman venganza de los médicos que intentaban curarlos. Casi treinta años después, en el 2003, un grupo de estudiantes universitarios emprende una excursión invernal que los llevará a una cabaña donde pretenden pasar unos días de típica diversión juvenil (sexo, drogas, etc.) Pero cuando los sorprende una tormenta de nieve y pierden el camino por dar una VUELTA EQUIVOCADA (guiño), terminan refugiándose en un hospital abandonado, donde seguramente estarán a salvo mientras mejora el clima, ¿cierto? (Spoiler: no).
Wrong Turn 4: Bloody Beginnings me pareció una indudable mejoría sobre la cinta anterior. El argumento podrá ser más simple (su único rasgo innovador es que el grupo de amigos incluye una pareja lesbiana... ¿cuánto tiempo les tomó imaginar eso?), pero los personajes están razonablemente bien definidos y no parecen TAN estúpidos como acostumbra el género. Además, las actuaciones muestran suficiente convicción para dar gravedad a algunos provocativos momentos de disyuntiva moral; y las escenas de "gore" son tan repugnantes y grotescas como cualquiera que hayamos visto en esta franquicia. El director Declan O'Brien (también responsable por el fracaso de la tercera parte - por no mencionar el clásico cormaniano Sharktopus) aprendió la lección, y esta vez decidió apoyarse en efectos prácticos, combinándolos sanamente con trucos digitales para lograr pasajes perturbadoramente reales (rara vez me ocurre, pero sentí leves náuseas durante el desollamiento de un personaje que se convierte en ingrediente principal de un "apetitoso" fondue - Nota: Versión "UNRATED"). Y hasta me gustó el tema musical Wrong Turn, interpretado por el desconocido grupo The Blackout City Kids (probablemente amigos del director).
Por el lado negativo tenemos los típicos problemas del libreto que provocan agujeros lógicos, períodos (cortos) de aburrimiento, y una irritante desviación del entorno original, pues en vez de desarrollarse al aire libre en los remotos bosques de Virginia, la mayor parte de la película toma lugar en el interior del hospital abandonado, lo cual me hace sospechar dos cosas: 1.- Wrong Turn 4: Bloody Beginnings está adaptada de un libreto de terror genérico que alguien escribió con un propósito distinto; o 2.- El director tuvo que alterar sus locaciones silvestres cuando encontró un clima demasiado hostil en los bosques de Manitoba (Canadá), donde se filmó la película.
Pero bueno... al aire libre o bajo techo, a fin de cuentas disfruté la película, y me dio gusto que esta modesta saga regresara al camino correcto después de extraviarse en su tercera parte. Sigo pensando que son mejores la original y la primera secuela, pero eso no impide darle una recomendación a Wrong Turn 4: Bloody Beginnings por ser una de las mejores cintas de horror directo a DVD que he visto este año (triste halago). Claro que mi recomendación solo aplica a los fans del "gore" y del horror independiente... después de todo, Wrong Turn 4: Bloody Beginnings no es para todos los gustos, y parece estar orgullosa de que así sea, lo cual le da puntos adicionales (en mi humilde opinión) por su sinceridad, por ser un buen antídoto contra el blando horror PG-13 que la temporada de Halloween parece atraer... y, claro, por recordarme que aún en mi cínica vejez no he perdido la capacidad de sentir repulsión por simples piezas de látex y sangre artificial.
Calificación: 8