jueves, 20 de diciembre de 2012

Pitch Perfect

Ya aprendí a aceptar que el romance es ingrediente indispensable de cualquier comedia juvenil (me guste o no), pero he descubierto que mis cintas favoritas de ese género son aquellas que tienen un argumento variado, donde puede existir un poco de romance, pero solo como elemento periférico que no distraiga demasiado del tema principal. Pitch Perfect se ajusta a esa descripción y, al igual que otras excelentes comedias juveniles (como Bring It On, Can't Hardly Wait y Fired Up), centra su atención en un sub-mundo estudiantil pocas veces visto, lo cual añade interés a los típicos conflictos y trilladas situaciones que impulsan la trama. La publicidad de la cinta sugiere que se trata de una imitación cinematográfica de Glee, con "estudiantes" de treinta años, rutinas musicales sobre-producidas y hueco melodrama adolescente. En cierto modo así fue, pero por alguna razón me gustó mucho, y terminé deleitándome con la interacción de sus personajes, su sentido del humor... y todos los clichés que copia desvergonzadamente de otras películas.

La trama comienza con la llegada de la joven Beca (Anna Kendrick) a la Universidad Barden, donde estudiará por mandato de su padre, un estricto profesor que usó sus conexiones para asegurar el ingreso de la rebelde chica. Sin embargo, el auténtico interés de Beca es convertirse en DJ y mudarse a Los Ángeles para producir música... lo cual nunca ocurrirá mientras permanezca en una pequeña escuela repleta de "nerds" que no comparten sus gustos musicales. Entonces Chloe (Brittany Snow), co-directora del conjunto "a capela" femenino llamado “Bellas” (que sufrió recientemente una humillante derrota en las competencias nacionales), reconoce el talento latente de Beca, y hace hasta lo imposible por convencerla de que se una al grupo. Pero cuando Beca finalmente acepta, descubre que su visión musical no es compatible con la de sus compañeras. ¿Lograrán encontrar un balance de estilos para triunfar juntas, o fracasarán por separado?

Como puede esperarse, Pitch Perfect incluye todas las escenas que conocemos de memoria: la introducción de la protagonista "outsider" (sabemos que es "alternativa" porque se pinta las uñas de negro); la pareja que se odia inicialmente; el obligatorio desafío a la autoridad; las audiciones graciosas; el montaje de entrenamiento; la pelea que separa a los amigos; etcétera. Afortunadamente esa falta de originalidad temática se vuelve irrelevante cuando hay tantos elementos positivos, empezando por la ágil dirección de Jason Moore (perfectamente capacitado para entender el material gracias a su experiencia en Broadway y en series de televisión juveniles), sin olvidar los números musicales, ejecutados "a capela" por los genuinos actores (claro, con apoyo de coros armónicos profesionales) y con suficiente espontaneidad para no perder la ilusión de improvisación. Confieso que, como buen viejito fuera de onda (demostrado por mi uso de la palabra "onda"), reconocí menos del treinta por ciento de las canciones (¿quién demonios es "La Roux"?), pero la desbordante energía de los intérpretes y la sólida selección de estilos me ayudaron a disfrutar los números musicales sin importar mi ignorancia de los autores originales. Por cierto, mi grupo a capela favorito (aparte de las Bellas) fue "Sockapella"... que gran fusión de disciplinas.

Aclaro que mi entusiasmo por Pitch Perfect no obedece tan solo a las canciones, sino al divertido libreto de Kay Cannon (veterana de sitcoms como 30 Rock y New Girl), basado en un libro de Mickey Rapkin. El humor que Cannon vierte en cada escena muestra ingenio e inusual creatividad, y si bien tiende a la asquerosidad de vez en cuando (hay más vómito del que yo esperaba en una cinta sobre un estilo musical tan tradicional), el balance de personalidades me pareció muy divertido y acertado, desde la irreverente Fat Amy (increíble Rebel Wilson, como siempre), hasta la protagonista interpretada por Anna Kendrick, quien aporta razonable profundidad a las elementales emociones del libreto. Por cierto, al principio de Pitch Perfect pensé que sería "un paso atrás" para Kendrick, en vista de su competente trabajo en roles más maduros (por ejemplo en 50/50 o Up In the Air), pero al final no lo sentí así, sobre todo cuando me enteré (gracias a los extras del DVD) de su aclamado trabajo en Broadway, donde obtuvo la más joven nominación al prestigioso premio "Tony". Y desde luego merece mención el brillante elenco de apoyo que incluye a Anna Camp y Brittany Snow (como las estresadas líderes de las Bellas); John Michael Higgins y Elizabeth Banks (como irreverentes e hilarantes comentaristas); el joven Adam DeVine, haciendo su mejor imitación de Jack Black; y simpáticos cameos de comediantes como Donald Faison y Christopher Mintz-Plasse, aportando risas en escenas que de otro modo serían intrascendentes.

No esperaba disfrutar tanto Pitch Perfect, y fue una agradable sorpresa poder añadirla a mi "lista corta" de comedias juveniles favoritas. Habiendo dicho eso, advierto que no será para todos los gustos pues, como dije antes, su argumento es demasiado simple y predecible para generar auténtica emoción, y lo mismo aplica a todas las instancias de "drama" reciclado que se ha manejado mejor en otras películas. Además, por tratarse de una adaptación, la guionista sintió la obligación de conservar algunos personajes (como el "roommate" ultra-fanático de Star Wars) y situaciones (como los nódulos en las cuerdas vocales) que parecen relevantes pero no conducen a algo concreto, y pudieron omitirse sin afectar la narrativa... lo cual de paso hubiera acortado un poco la duración de la cinta, que sentí un poco larga para este género. Pero bueno... ninguna de esas quejas afectó sustancialmente mi gusto por esta película, y puedo recomendarla para quien disfrute la comedia juvenil, el cine musical o las comedias románticas. En resumen, si así fuera Glee semana a semana, yo sería el primero en sintonizarlo (¿aún se usa el verbo "sintonizar"? Les dije que estoy viejo).
Calificación: 9

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Pablo, me permito comentar algo fuera de tema, sólo para recomendarte que cuando veas "life of pi" lo hagas, sin dudaro, en digital 3D... Es la única película que he visto hasta la fecha en donde tiene sentido esa dudosa tecnología

Anónimo dijo...

Lo delos nodulos (o como se llamen) son una "sutil" subtrama para que tenga una voz grave (como lo mencionaba el comentarista al principio de la pelicula), en el numero musical final se nota que canta en un tono grave.

Pablo del Moral dijo...

Anónimo: Muchas gracias por la recomendación, pero no sé... me desagrada ver la imagen oscura y opaca por culpa de los lentes. Supongo que la decisión dependerá del horario al que pueda ir. Gracias de nuevo y saludos!

Anónimo 2: Muchas gracias por la explicación; sí, entendí eso de las notas graves, pero en ningún momento me pareció algo relevante al final, donde solo se escuchan en un par de ocasiones y no se muestran como algo significativo en el desempeño del grupo. Pero bueno... supongo que respeta la trama del libro. Saludos y gracias de nuevo!