lunes, 18 de mayo de 2009

Los Secretos del Poder (State of Play)

Un re-make norteamericano de una mini-serie británica parece una dudosa proposición, empezando por la arrogante perversión narrativa cometida al extirpar la historia de su natal Londres y trasplantarla al mundillo político de Washington, la capital de los Estados Unidos. Peor aún, el elenco de sólidos actores de carácter que empleados en la versión televisiva han sido reemplazados por "estrellas" de cine que quizás atraerán al público, pero al mismo tiempo roban la atmósfera de anónima intriga detrás de la ostentosa fachada del poder. Habiendo dicho eso, confieso que las seis horas de la mini-serie me parecieron un poco cansadas, especialmente cuando la trama desvía su atención del misterio principal para contemplar las vidas privadas de las personas envueltas en un escándalo político. Por eso tenía cierta esperanza de que una juiciosa condensación de la historia podría resultar en una película más interesante, con mejor ritmo y suficiente densidad para sacar provecho de sus abundantes niveles ideológicos y dramáticos.

La cinta
Los Secretos del Poder cumple algunas de esas condiciones; al mismo tiempo pierde un poco de validez y honestidad por las curiosas decisiones que tomó el director Kevin McDonald (y su escuadrón de guionistas) al realizar la mencionada condensación. Pero es un tema casi irrelevante, pues de cualquier modo será mejor apreciar esta película sin conocer su poco vista predecesora, que probablemente será el caso para la inmensa mayoría de sus espectadores.

Al principio de la película nos enteramos de la muerte accidental (o quizás suicidio) de la joven Sonia Baker (Maria Thayer), asistente del senador Stephen Collins (Ben Affleck), quien conduce una investigación sobre la poderosa empresa PointCorp, empleada por el gobierno como auxiliar en las guerras de Irak y Afganistán. Cuando el senador anuncia públicamente el deceso de su asistente pierde el control de sus emociones, y la prensa sospecha de inmediato la existencia de una relación romántica entre ambos. Sin otra opción viable, Collins confirma esas sospechas y, para mantener su dignidad durante el inminente frenesí periodístico, pide ayuda a su viejo amigo Cal McAffrey (Russell Crowe), veterano reportero especializado en escándalos políticos que conoce como nadie los manejos internos de Washington. Sin embargo McAffrey sospecha que hay algo raro detrás de la situación, y recluta a la novata reportera Della Frye (Rachel McAdams) para indagar sobre la conexión entre la muerte de la joven y el asesinato de un ladrón de poca monta; no parecen tener nada en común... pero eventualmente los llevarán al descubrimiento de una siniestra conspiración que pondrá en peligro sus vidas.

En algunos aspectos Los Secretos del Poder busca emular la atmósfera de All the President's Men, con su combinación de alta intriga política y conflictos de conciencia entre reporteros con buenas intenciones pero dudosa ética en sus métodos. También detecté "homenajes" a JFK, particularmente en la escena donde una "fuente anónima" revela importantes datos sobre el misterio, entre cortes rápidos a helicópteros y famosos edificios de Washington. No obstante, la mayor influencia sobre esta película se puede adjudicar a la oleada de similares thrillers políticos que buscan denunciar algún aspecto del terrorismo en el medio oriente, o la guerra por el petróleo, o los deshonestos (pero legales) métodos que emplean ciertas empresas para ganar miles de millones de dólares explotando el sufrimiento ajeno y aprovechando las limitaciones y excesos de la infraestructura militar.

Muy loable intención, que aplaudo ideológicamente. Pero, así como ha ocurrido con los más recientes exponentes de esta tenden
cia, Los Secretos del Poder sufre el inevitable problema del anacronismo. Es cierto que estos temas seguirán siendo importantes durante años (quizás décadas)... pero resultaban más interesantes para el público general hace cinco o seis años (por ejemplo, en el 2003, cuando se estrenó la mini-serie State of Play). Hoy en día, con más urgentes preocupaciones en la conciencia global, los embustes de una empresa norteamericana parecen menos relevantes que los nuevos virus que flotan en el aire, o la inseguridad laboral generada por el colapso económico mundial, o la falta de alimento y agua a corto plazo, o los cambios climáticos que podrían hacer inhabitables algunas de las más densamente pobladas regiones del planeta. Francamente, la realidad está superando a la ficción, y mientras Hollywood no defina nuevos villanos más apropiados para nuestra diaria realidad (como en la película The International), será difícil despertar la imaginación del público con cansados comentarios sobre una guerra cuya caducidad ya expiró, si no en la realidad, ciertamente en la corta atención de la opinión pública.

Quizás no resulta justo evaluar una película por el contexto histórico que la rodea, pero lo menciono porque esa fue mi percepción al verla. Además, para empeorar el asunto, puedo señalar algunos problemas en su intrínseco desarrollo y manufactura. No puedo decir que haya malas actuaciones; el elenco entero cumple decorosamente sus papeles y comparten buena química que enriquece la trama (en particular me gustó la áspera pero afectuosa interacción entre el reportero y su editora, interpretada por la siempre perfecta Helen Mirren). Pero la dirección carece de energía, y cuesta trabajo encontrar pasión en el desempeño de los actores... sólo técnica. También siento que debería haber más suspenso, en vez de un tibio desfile de situaciones y escenas conectadas entre sí por una vieja fórmula narrativa (valientes reporteros en busca de la verdad) y no por el estimulante descubrimiento de conexiones ocultas y escandalosos secretos. En resumen, hay demasiadas coincidencias, demasiados personajes periféricos de dudoso valor narrativo y demasiadas escenas redundantes que repiten lo que ya sabemos... todo ello una posible consecuencia de la previamente mencionada condensación de la mini-serie. A pesar de todo eso la conclusión gana un poco de fuerza y genera tardíamente el suspenso que debió sustentar la película durante sus dos horas previas.

Los Secretos del Poder es una película interesante, bien actuada y sobriamente dirigida, pero no logra alcanzar un nivel de calidad o impacto suficiente para distinguirse de muchas otras realizadas con el mismo estilo y motivación. Quizás con un libreto más pulido, o mayor énfasis en la acción, o en la política (o incluso en la moderna disyuntiva que enfrenta la industria periodística entre los medios tradicionales y los electrónicos), hubiera resultado más relevante y memorable. Puedo recomendarla con cierto recelo porque hay mejores películas de similar tema, pero con confianza en sus virtudes propias. De cualquier modo, veremos cuánta vida le queda a este género. Los Secretos del Poder podría señalar el fin del thriller político-militar (al menos temporalmente), antes de que lleguen las cintas de horror eco-médicas o las comedias romántico-bancarias. O alguna combinación igualmente transitoria que explote nuestros temores y esperanzas. Por favor, Hollywood... ya hacen falta nuevos héroes y villanos.
Calificación: 7

7 comentarios:

mora8 dijo...

hola pablo,sin duda mirare esta pelicula, practicamente no puedo pasar sin ver una pelicula de russell crowe :P aunque la verdad no espero tanto como en otras producciones donde el aparece, intentare dejar mi comentario ya que la vea

Anónimo dijo...

Pablo : ¿ Qué opinás de estos próximos estrenos ?

1) Taking Woodstock
2) Antichrist
3) A Serious Man
4) Where the Wild Things Are
5) What Just Happened

Gracias y saludos.

Pablo del Moral dijo...

Mora8: Espero que te guste más que a mi. También me gusta el trabajo de Russell Crowe, aunque no me considero fanático incondicional. Veremos qué te parece en esta película. Saludos y gracias.

Anónimo:
Taking Woodstock: Desde Crouching Tiger, Hidden Dragon me ha parecido muy irregular la filmografía de Ang Lee, pero el tema me atrae mucho y parece haber reunido un buen elenco; veremos si hace algo memorable o simplemente competente.
Antichrist: Cuando Lars Von Trier deja a un lado sus severas pretensiones artísticas puede lograr cosas tremendas; no sé si lo logre en Antichrist, pero definitivamente me interesa ver su versión de una película de horror.
A Serious Man: Francamente no sé qué pensar. Burn After Reading me gustó, pero creo que dista mucho de las mejores comedias de los hermanos Coen. Veremos si este nuevo intento logra acercarse más a las glorias pasadas, o confirma que ya perdieron "el toque mágico".
Where the Wild Things Are: Me interesa porque conocí a esos personajes de niño, pero aparentemente ha habido tanta influencia del estudio sobre la visión de Spike Jonze que mi optimismo ha decaído considerablemente.
What Just Happened: Después del fiasco que fue Envy, Man of the Year sólo logró entretener. Dudo mucho que Levinson regrese jamás a las alturas de Diner o Good Morning Vietnam, pero mientras no caiga demasiado quedaré satisfecho. Después de todo, el elenco de What Just Happened parece impresionante. Gracias por preguntar y muchos saludos!

Anónimo dijo...

Pablo : ¿ Qué calificación le darías a Man of the Year ?

Gracias y saludos.

mora8 dijo...

hola pablo precisamente hoy lei una noticia sobre la pelicula antichrist, sinceramente no conozco al director pero me llamo la atencion el hecho de que fue aplaudida por un sector de la gente y abucheada tambien =S haha pero bueno,pablo has visto la pelicula clash of titans? la verdad no recuerdo bien el nombre pero es algo asi, me llamo la atencion por el hecho de el remake que se hara con sam worthington y liam neeson

Vick dijo...

Despues de los comunistas estos cuates ahora no dejan a los terroristas, al rato van a ser los "terroristas comunistas mutantes" o algo asi, estan mas actuales los temas que mencionaste Pablo aunque no se si mas interesantes (se necesitaria un buen guion), a mi siempre me gusto mas la trama de Parallax view de Pakula, similar a The manchurian candidate, con asesinos entrenados mentalmente, esa idea es muy interesante.

Pablo del Moral dijo...

Anónimo: Creo que le pondría un 7 a Man of the Year. Hace buenos comentarios sobre la política/espectáculo contemporánea y Robin Williams queda bien en su papel, pero el guión no me dejó del todo satisfecho. Gracias por preguntar y muchos saludos.

Mora8: Claro que vi Clash of Titans! Fue una de las películas que contribuyeron al renacimiento del cine de fantasía en los ochentas. Me gustó, pero la considero inferior a tantas otras de aquella década, desde Legend hasta DragonSlayer. Saludos!

Vick: Lamentablemente creo que cada vez serán menos comunes cintas como las que mencionas. Parecería que en hoy todo lo relacionado con espías debe acompañarse con excesiva acción y efectos, en vez de respaldarse en ideas sólidas y guiones bien escritos. En fin, así es el progreso. Muchos saludos y gracias.