Otra Ridícula Película de Baile (Dance Flick)

Un bailarín gira tan rápido que perfora el piso de la pista donde baila. Una bailarina de ballet ensaya en su casa y golpea con el pie a los miembros de su familia durante sus veloces piruetas. La maestra de baile que usa mallas ajustadas se apellida Cameltoé (con acento en la "e", para que suene francés). Y, por anacrónico que suene, tenemos también un pastelazo en la cara. Ese es el nivel general de los chistes que encontrarán en Otra Ridícula Película de Baile. Sin contar, desde luego, las obligatorias parodias de eventos actuales, celebridades y películas en su mayoría musicales, aunque algunas, como Twilight, no tengan nada que ver con el tema; pero es popular, así que ¿por qué no?. Claro que, considerando la calidad de este sub-género (Date Movie, Epic Movie, Meet the Spartans), no debería extrañarme la desesperación de los guionistas por generar la mayor cantidad de "chistes", con la esperanza de que algunos funcionen y no decepcionen a sus "fans".

Me gustaría describir el argumento de la película, si lo tuviera. La protagonista es Megan (Shoshana Bush), y sus aventuras siguen vagamente la trama de Save the Last Dance, aunque se vea interrumpida por escenas copiadas de Step Up, You Got Served, Center Stage, Hairspray, Chicago, High School Musical, ... en fin, cualquier cinta vagamente musical de los últimos treinta años (sin olvidar Flashdance, Roller Boogie y Fame... no podía faltar material para que nosotros los viejos nos sintiéramos incluidos). Eventualmente la chica se enamora de alguien y llega al gran concurso de danza, o algo así. Fin.

Creo que lo que más me sorprendió de Otra Ridícula Película de Baile fue que los productores invirtieran dinero en los derechos de canciones como Fame, Maniac y Superfreak (como excusa para repetir la célebre frase de David Chapelle "I'm Rick James, bitch!"). Claro, no son las versiones originales, pero en un proyecto tan barato e improvisado como éste (al menos así se siente) hasta la breve inclusión de esas piezas llama la atención. Y ya que estoy esforzándome por encontrar elogios, también diré que me hicieron reír algunos de los más virulentos comentarios raciales de los hermanos Wayans. Algunos son tan inapropiados que funcionan tan solo por su audacia.

Entonces, si ansían ver los más bobos y predecibles chistes sobre películas musicales, no dejen de ver Otra Ridícula Película de Baile, y de paso apoyen con su dinero la creación de más “geniales” obras como ésta. Lamento haber contribuido con mi boleto, pero lo hice tan sólo para evitar que otros cayeran en la misma trampa. Nuestra única esperanza es que el siguiente opus de los Wayans sea una parodia de sus parodias, provocando así una paradoja en el espacio-tiempo que las eliminaría para siempre del universo. Definitivamente pagaría con gusto por ver esa película.
Calificación: 3